El gran reto de nuestra sociedad
Las sociedades desarrolladas tienen un gran reto en la actualidad, evolucionar en lo que a la movilidad sostenible se refiere hacia modelos económicos que se caractericen por el bajo consumo energético y de carbono. En conclusión, podríamos decir que éste es el reto de la sostenibilidad.
Los objetivos últimos de alcanzar una movilidad sostenible se centran en garantizar que nuestros sistemas de transporte respondan a las necesidades económicas, sociales y medioambientales, de manera que se reduzca al máximo el impacto negativo para nuestro entorno.
Estrategias
Conjuntamente con los factores mencionados, la funcionalidad y la organización de los sistemas de movilidad dependen en gran medida del transporte. Por esta razón es necesario seguir estrategias que permitan resolver los problemas que surgen en materia de movilidad.
Es importante adoptar estas medidas sin dejar de tener en cuenta el funcionamiento y la organización urbana e interurbana. Así pues, las estrategias de movilidad deben abordar tanto los problemas de la congestión, como soluciones integrales y coherentes.
Entre los principios por los que se rige la movilidad sostenible destaca el hecho de asegurar un sistema de transporte menos agresivo para el entorno urbano y para el ciudadano, más planificado, eficiente, ahorrador de recursos y más respetuoso con el medio ambiente.
Los objetivos concretos que se pretenden alcanzar son potenciar la movilidad a pie, en bicicleta, en transporte público, mejorar la rentabilidad de los traslados en vehículo privado, gestionar eficientemente el estacionamiento, coordinar la intermodalidad de desplazamientos, informar, formar y educar en materia de movilidad y de planificación del territorio.